El Boletín kalimotxero

El día 29 de noviembre algunos kalimotxeros nos fuimos hasta Bilbo a ver a los Warcry en directo. El concierto era en la sala Santana 27, una sala en la que se celebran actividades y conciertos de todo tipo y que está situada en mitad de una lúgubre zona de pabellones.

El sistema de venta de entradas no era tan malo como el que sufrieron mis compañeros en la cola de ACDC, pero no era mucho mejor... No encontramos ningún punto de venta físico para cogerlas, así que no tuvimos más remedio que comprarlas a través de la página web de la sala. Es decir, las compras por internet, te las imprimes en tu casa y vas con el enorme trozo de folio hasta Bilbo...

En fin, allá que fuimos hacia la capital Vizcaína haciendo una paradita a medio camino para llenar el deposito (del coche) y para comprar unos bocatas para recuperar fuerzas después del evento. Cuando llegamos nos sorprendió ver que apenas había coches aparcados en la puerta de la sala, pero nos sorprendió aún más el frío que hacía. Sin prisa, no comimos un pequeño tentempié y tiramos para dentro. El concierto acababa de empezar cuando entramos en la sala. Me extrañó ver que la gente solo llegaba a llenar la mitad de la sala mas o menos, gracias a lo cual la temperatura dentro de la misma era muy agradable.

Y ahora empiezo a hablar del concierto...

El concierto empezó hacia las 21:30 (aunque en la entrada ponía que empezaría alas 22:30) y duró aproximadamente 2 horas. Era la primera vez que les veíamos en directo y a todos nos impresionó la voz de Víctor García, cantante del grupo, que a mí personalmente me encantó. El concierto estuvo muy bien. Por decir algo malo, decir que se centraron demasiado en el último disco Revolución del cual tocaron prácticamente todos los temas, aunque no faltaron grandes temas de discos anteriores como Ulises, Alejandro, Más allá... pero también hubo temas que se quedaron fuera del setlist como Hoy gano yo, Trono del metal o Mirando al mar, lo cual nos dejó a todos con ganas de más, mucho más. Destacar también a Pablo García, el simpático guitarrista que se lo curró mucho en el concierto, poniendo caras raras, animando mucho al público y tocando con la guitarra detrás de la cabeza. Buen ambiente, un público entregado y un grupo a la altura de las circustancias. Un muy buen concierto de una muy buena banda que espero volver a ver pronto (concretamente el 13 de febrero en la sala Artsaia de Pamplona).

Como curiosidad, al salir del concierto me encontré cara a cara con Tammy, aquella gótica enorme que concursó en "La casa de tu vida". Últimamente me estoy cruzando con muchos famosetes de alto nivel: Tammy, Pumares...

Al salir del concierto nos comimos otro tentempié para recuperar fuerzas mientras nos reíamos de los bacalas que se dirigían a la sala Santana, con intención de pasar toda la noche oyendo "chunta chunta" y poniendose hasta arriba de... buena música. Menudo cuadro.

Aquí os dejo cuatro videos del concierto:

Nana


Un poco de fé


Devorando el corazón


Más allá